Desarrollo tecnologico
Abr 10 2018

¿Es inevitable que el desarrollo tecnológico se dé a costa del humano?

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Publicado el 10 de abril, 2018

En la formación y educación nos vienen a la mente las siguientes preguntas, ¿Es inevitable que el desarrollo económico y tecnológico se dé a costa del ser humano?

El mundo ha cambiado nuevamente en forma tan profunda que el ser humano ha quedado subordinado a los objetos de su creación. Muchas veces los objetos no son producidos para satisfacer las necesidades, sino las necesidades producidas para satisfacer los objetos.

Una de las labores inmediatas a desarrollar es adaptar críticamente los sistemas tecnológicos en forma tal que pueda aprovecharse lo mejor que conlleva las maravillosa experiencia de la ciencia y la tecnología, y, a la vez, evitar que una transferencia cultural acrítica e inconsciente nos conduzca, en un tiempo no demasiado largo, a la abolición de nuestro propio rastro y de nuestro propio rostro.

Es imprescindible un proceso de humanización de la ciencia, la técnica y las propias Humanidades. No queremos el mundo robotizado de la pesadilla orwelliana, queremos un mundo humano, donde la técnica esté al servicio de los valores y no los valores y el ser humano al servicio de los instrumentos de dominación.

Consideramos útil presentar algunos impactos de la IV Revolución Industrial, lo que está pasando en nuestras vidas como adultos, en nuestra relación y comunicación con los jóvenes universitarios, o en las escuelas técnicas y educación secundaria.

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Debemos estar muy claros que somos de diferentes generaciones, no solo por la edad, sino por generaciones tecnológicas. Nos pasa en el mundo universitario y en las familias: la necesidad de comprender por qué tenemos dificultades en la educación superior y secundaria, que tenemos brechas generacionales tecnológicas, profesores universitarios que tienen alumnos con más conocimientos y nuevas habilidades en el uso de la tecnología de comunicación, TIC, o jefes y gerentes de empresas con dificultades en la comunicación con los jóvenes profesionales recién egresados.

  • GI Generation (nacieron entre 1901 y 1926)
    Silents (1927-1945)
    Baby Boomers (1946- 1964)
    Generation X (1965- 1980)
    Millenials (1981-2000)
    Boomlets (nacieron después del 2001)

Esta generación pertenece al mundo de la información inmediata. Cuentan con computadora, televisión y teléfonos inteligentes y son, en gran medida, el nuevo blanco de las empresas que concentran sus esfuerzos en las plataformas digitales. Para ellos no existen las fronteras o brechas culturales. Son nuestros alumnos en las aulas actualmente.

Es por esto que el conocimiento previo de estas seis generaciones resulta indispensable en la planeación de estrategias en la educación superior y en el uso de las TIC.

La llamada IV Revolución Industrial, como se conoce, se basa en sistemas cibernéticos que combinan la infraestructura física con el software, las comunicaciones de tecnología digital y el Internet de las cosas para transformar las fábricas tradicionales en fábricas inteligentes.

Klaus Schwab, fundador y presidente ejecutivo del Foro Económico Mundial (WEF; por sus siglas en inglés) y autor de “La Cuarta Revolución Industrial”, explicó que ésta se está construyendo con la fusión de tecnologías que borran las fronteras entre las esferas físicas, digitales y biológicas.

La cuarta Revolución Industrial es el capítulo más reciente de nuestra historia humana que implica desbloquear el potencial no utilizado de nuestros cerebros a través de los usos de la inteligencia artificial, digital, virtual, grandes datos y un sistema que introduce una nueva historia de nuestro futuro para permitir diferentes modelos humanos que cambiarán nuestra forma de existir para siempre.

Las máquinas inteligentes podrían automatizar muchos trabajos en campos como la Educación y la Medicina, lo que ayudaría a reducir los costos. Las nuevas herramientas analíticas disponibles para los investigadores podrían conducir a avances en los campos científicos, desde la energía a la medicina a las ciencias sociales, dijo Ryan Avent columnista de economía y autor del libro “La riqueza de los seres humanos: el trabajo y su ausencia en el siglo veintiuno”.

Nicholas Davis, jefe de Sociedad e Innovación y miembro del Comité Ejecutivo del Foro Económico Mundial, explicó: “probablemente el desafío más importante que enfrentará la cuarta revolución industrial es asegurar que esté centrado en el ser humano e impulsado por valores positivos”.

Eduardo Solórzano, autor del presente artículo de opinión, es profesor, investigador y profesional acreditado por el Consejo Nacional de Evaluación y Acreditación (CNEA). Actualmente, se desempeña como asesor de acreditación para los  programas de maestría de UAM.