
6 estrategias para emprender durante una recesión
Publicado el 21 de junio, 2018
Si en algo coinciden los expertos, es que los negocios emergentes pueden recortar gastos, cambiar de estrategias y brindar servicios tercerizados con mayor facilidad que las empresas que ya están establecidas, durante una recesión. La clave, aseguran, está en saber aprovechar las oportunidades cuando tocan nuestra puerta.
Brad Sugars, consultor empresarial y columnista de la Revista Entrepreneur, explica que él ha observado este fenómeno de primera mano, pues comenzó su negocio de consultorías empresariales mientras vivía en Australia durante la década de los noventa, una época en la que el país se tambaleó a raíz del colapso de los préstamos y los ahorros en Estados Unidos.
Sugars asegura que, para proteger a una empresa durante una crisis económica, se deben poner en práctica las siguientes estrategias:
1. Vendé productos y servicios relacionados a las necesidades del momento
Incluso en medio de una recesión, las personas tienen necesidades básicas como la adquisición de servicios informáticos, la compra de comida o la recolección de basura. Según el experto, la clave está en no ofrecer productos que los consumidores perciben como innecesarios, o cuya compra podría retrasarse lo más posible o cambiarse por una opción “más barata”.
2. Usá tácticas de marketing de guerrilla
Sugars expresa que existen muchas maneras de promover un negocio sin tener que gastar una fortuna en publicidad. Por ejemplo:
Si tenés una cafetería, podrías regalar mil tazas de café, a un costo reducido que vos cubrirías, para promover tu negocio y así hacer que quienes no te conocen compren tu producto en el futuro inmediato.
Podés pintar un vehículo para promover tu empresa en toda la ciudad.
También podés artículos de opinión para el periódico local, donde mencionen el nombre de tu empresa y en donde brindés información útil a los lectores sobre determinado tema.
3. Conseguí clientes grandes a través de un descuento
En muchos casos, los pequeños negocios pueden cubrir gran parte de sus costos si consiguen al menos dos contratos grandes. Por ejemplo, una agencia de Relaciones Públicas tiene la opción de cerrar un trato significativo, brindando al cliente algún tipo de descuento que éste perciba como beneficio.
Si estás en el negocio de construcción de piscinas, lograr un acuerdo de asociación con un par de contratistas te podría ayudar a conseguir proyectos que no podrían surgir si trabajaras solo.
4. Contratá “part-time”
Si estás comenzando el negocio, podés empezar contratando colaboradores de tiempo parcial o tercerizar el servicio para mantener tus costos a raya. Y a medida que el negocio vaya creciendo y la economía mejore, pensá en contratarlos a tiempo completo.
5. Operá bajo un presupuesto estricto
No es necesario que decorés tu oficina con artículos de lujo y tampoco te vas a morir si te sentás en una silla de oficina de segunda mano. Además, no es urgente tener compromisos a largo plazo, comprando o arrendando un vehículo para hacer mandados.
6. Comprá un negocio en lugar de empezar uno de cero
Si adquirís el negocio adecuado, tendrás una base y un flujo de ingresos que harás crecer a medida que pase el tiempo, en lugar de empezar de cero. “Es posible que pagués un poco más por arrancar, pero tendrás dinero en tu bolsillo inmediatamente”, advierte Brad Sugars.
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